Mientras sigo viviendo, un montón de personas dejó de vivir, incluyendo unas pocas personas que he conocido y he querido. Cada mañana lo agradezco, pero creo que no he sido suficientemente agradecida con el hecho de que estoy sana, puedo moverme y pensar con claridad; suelo darlo por hecho como si lo hubiera pagado y tuviera una factura guardada, con la que haría una reclamación si hiciera falta.
Silvia Parque
Es cierto que todos olvidamos que tenemos que morir, que no hay nada comprado. Un beso.
ResponderEliminarHe conseguido tener eso presente cada día; ahora quiero tener fresca la conciencia del tamaño de la esplendidez del regalo :)
EliminarUn beso, Susana.