jueves, 8 de septiembre de 2011

Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete ocho; de nuevo: uno, dos, tres...

Hoy vuelvo al ejercicio. Estoy cansadísima porque me desvelé aún más que de costumbre; pero un día tenía que ser.

Presiento el dolor. Ganas, no tengo. Al cuerpo, sin embargo, le viene bien el aviso de que está vivo, y hay que ser buena con él -tan bien que se porta conmigo-. Después de unos días, disfruto los cuarenta y cinco minutos de movimiento; el esfuerzo es llegar a ese día, después de unos días.

Silvia Parque

2 comentarios:

  1. hola!!! simplemente una palabra de agradecimiento por visitar mi blog (aun cuando lo tengo algo abandonando) y por dejar ese comentario tan lindo! ;)

    sara (http://mysweetheartisuc.blogspot.com)

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